Una persona, con la que he estado trabajando, mantenía una inquietud creciente acerca del contenido de sus sueños, y «los mensajes» que «debería entender de ellos». Cuestión en la que estaba invirtiendo una cantidad considerable de tiempo y de dinero, ya que adquiría toda obra publicada en formato de libro en la que se insinuara alguna clave para su interpretación.
De hecho, lo primero que expuso a la pregunta ¿en qué puedo ayudarte?, fué precisamente este asunto, y de una forma rápida avanzamos para comprobar lo que estaba apoyando de fondo, «el verdadero asunto», y es que le estaba sirviendo como forma de no atender a la situacion de desempleo que mantenía en ese momento.
Al margen de la razón de fondo mantenida por esta persona para «perderse» en las expeculaciones acerca del «contenido de sus sueños»,. sí que es oportuno señalar lo poco útil y la inestabilidad personal, que nosotros podemos auto alimentar en base a simples interpretaciones, que aceptamos como explicación de lo que nos pasa otorgándoles credibilidad. La cuestión empieza a complicarse, cuando ante un mismo hecho, en distintas obras, encuentras interpretaciones diferentes.
Limpiar el asunto no llevó demasiado tiempo, cuando esta persona pudo apreciar que en realidad, el tema de los sueños, estaba siendo utilizado como distracción y forma de escape; así como la inutiildad de la labor, ya que las posibilidades de interpretación podrian ser casi infinitas; y que en cualquier caso, lo esencial, no era volver a encontrar una razón para justificar el malestar a partir de la interpretación de un sueño, sino, abordar directamente el malestar; y para ello no necesito ninguna interpretación, el propio malestar ya es una «alarma suficiente», como para prestarle atención.
Esto, también es una habilidad que puedes aprender, y puedo ayudarte a encontrar las herramientas para hacerlo.