Haz una lista con cosas que entiendes como probabilidad que te ocurran en un día, incluye unas diez cosas -o más- de todo tipo: encuentro con personas, recibir noticias, condiciones meteorológicas, sucesos en el trabajo, en la familia…. A cada cosa otórgale una puntuación entre uno, dos, tres…hasta diez, y atendiendo al grado de posibilidad que les dés para que ocurran -menos puntuación menos posiblidad-.
Cuando estés pensando en las cosas que van a formar parte de la lista, nota cómo es tu pensar acerca de esas cosas y cómo te sientes con respecto a ellas. Las imaginas como un «hecho» que ocurrirán, como una «creencia» que ocurrirán, como un «deseo» que ocurrirán, como un «temor» a que ocurran…
Finalizado el día, o el periodo para el que has hecho la predicción, verifica el resultado «real» de lo ocurrido y en qué grado se ha cumplido o no. ¿Cuáles han sido las diferencias?, ¿con las cosas que has vivido como negativas, con miedo, paralizantes…qué grado de exactitud se ha dado?…También atiende a las cosas que no has tenido en cuenta, ¿qué cosas han ocurrido que resaltarías y no estaban en la lista?, ¿qué cosas positivas han ocurrido, qué cosas neutrales?…Como puedes comprobar nuestro atender podemos expandirlo más allá de donde normalmente lo focalizamos.
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